30 enero 2007

Luna Tita

Luna

Me invade la tristeza profunda. Después de ese día, nunca volví a verte ni a acariciar tu pancita blanca y suave. Te pienso y la imagen amarilla de tu mirada duele. Duele pensar que no estarás más. Que se acabaron los ronroneos eternos, los pelos blancos cayendo como nieve por todos lados, los saludos de mañana y las despedidas de noche, tus mordiscos suaves en mis manos, tus garritas en mis carteras, el tarro de atún y la leche compartida entre gatas... la vida felina que nos dabas. La última vez que te vi, me arrodillé, te abracé y te besé la frente. Te dije adios. Al menos pude despedirme, gatuna, de ti.

Luna, nunca entenderé porqué te fuiste así. ¿Porqué este espiral de dolor continúa? Siempre pensé que vivirías muchos años y que jugarías con mis hijos. Fuiste efímera. Fuiste una Moe Iti, un pequeño sueño.

Nos convertiste en Los Gatos. Por ti seremos gatos siempre.

Adios mi niñita.
Vuela al cielo de los gatunos.


Ven, mi hermoso gato, cabe mi corazón amoroso;
retén las garras de tu pata,
y déjame sumergir en tus bellos ojos,
mezclas de metal y de ágata.
Cuando mis dedos acarician complacidos
tu cabeza y tu lomo elástico,
y mi mano se embriaga con el placer
de palpar tu cuerpo eléctrico,
veo a mi mujer en espíritu. Su mirada,
como la tuya, amable bestia,
profunda y fría, corta y hiende como un dardo,
y, de los pies hasta la cabeza,
un aire sutil, un peligroso perfume,
flotan alrededor de su cuerpo moreno


A tal punto su timbre es tierno y discreto;
pero, aunque, su voz se suavice o gruña,
ella es siempre rica y profunda :
allí está su encanto y su secreto.
Esta voz, que brota y que filtra,
en mi fondo más tenebroso,
me colma cual un verso cadencioso
y me regocija como un filtro.
Ella adormece los más crueles males
y contiene todos los éxtasis;
para decir las más largas frases,
ella no necesita de palabras.
No, no hay arco que muerda
sobre mi corazón, perfecto instrumento,
y haga más noblemente
cantar su más vibrante cuerda.
Que tu voz, gato misterioso,
gato seráfico, gato extraño,
en que todo es, cual en un ángel,
Tan sutil como armonioso


De su piel blonda y oscura
brota un perfume tan dulce, que una noche
yo quedé embalsamado, por haberlo
acariciado una vez, nada más que una.
Es el espíritu familiar del lugar;
él juzga, él preside, él inspira
todas las cosas en su imperio;
¿No será un hada, Dios?
Cuando mis ojos, hacia este gato amado
atraídos como por un imán,
se vuelven dócilmente
y me contemplo a mí mismo,
veo con asombro
el fuego en sus pupilas pálidas,
claros fanales, vívidos ópalos,
que me contemplan fijamente.


Los amantes fervorosos y los sabios austeros
gustan por igual, en su madurez,
de los gatos fuertes y dulces, orgullo de la casa,
que como ellos son friolentos y como ellos sedentarios.
amigos de la ciencia y de la voluptuosidad,
buscan el silencio y el horror de las tinieblas;
el Erebo se hubiera apoderado de ellos para sus correrías fúnebres,
si hubieran podido ante la esclavitud inclinar su arrogancia.
Adoptan al soñar las nobles actitudes
de las grandes esfinges tendidas en el fondo de las soledades,
que parecen dormirse en un sueño sin fin;
sus grupas fecundas están llenas de chispas mágicas,
y fragmentos de oro, cual arenas finas,
chispean vagamente en sus místicas pupilas.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Nuestra niña, se fue
no me imagino que designio misterioso hizo que que no estuviera mas aqui.
era nuestra compañera, nos amaba (si, nos amaba, no eramos solo su fuente de comida).
ella es parte de lo mejor de nuestro pasado, la parte que si recordaremos con cariño y nostalgia. por suerte algo de ella aun vive, esos hermosos seres que vi nacer, y que deben estar por ahí siendo el teléfono de alguien.
Comienzo a creer que te veré de nuevo, no me cabe duda de que tenias un alma hermosa y transparente, de gata.

Anónimo dijo...

Ayudándolos a sentir, una verdadera pena lo que pasó.

Y muy lindo su réquiem, no me cabe imaginar mejor despedida para la amiga felina esa.

Saludos,

M.

Anónimo dijo...

señores Carlot y mr. k

su gatita era muy bella, estoy segura de que está en un lugar lleno de gatitos blancos como ella...hace un tiempo se murió mi gato, lo extraño demasiado, pero a veces lo escucho maullar. aún me visita. y su Lunita también lo hará.

un abrazo de parte de una gatómana que pasaba por aquí

carlot dijo...

gracias...